En la oficina se ríen de mí cuando en lugar de delantal digo mandil, pero ¿qué queréis que os diga? Me chifla la palabra mandil. De hecho, el origen del nombre proviene del latín, mantile.
El delantal tuvo su momento ritualístico en la historia acompañando ideas de la francmasonería. Era una prenda masónica con significado especial además de hacer lo que tenía que hacer: proteger en las tareas duras. Vamos, lo que viene siendo el delantal que todos conocemos, pero aquellos se organizaban por colores dentro de la jerarquía de esta organización.
También están los delantales de zapatero, que suelen ser más duros que los convencionales que usamos en el hogar. Los de zapatero remendón (este nombre me gusta tanto como la palabra mandil) se hacían al principio de piel de oveja, pero luego valió con hacerlos de un textil fuerte.
Hoy en día, algunos de nosotros los hemos visto antes de caer en crisis y casi desaparición en los hogares, ha resurgido de sus cenizas. El mandil se usaba en casa para evitar mancharse la ropa y tener que lavar. Eso es. La gente antes no tenía 20 vestiditos de Zara en el armario y mucho menos un lavadora a la que darle trabajito. Antiguamente se lavaba a mano, los más humildes tenían pocos trapillos para lucirse y el delantal era su súper equipo de protección.
En la actualidad, el delantal pisa fuerte de nuevo. Los chefs mediáticos como Arguiñano en España, Oliver en Reino Unido y en el resto del mundo, entre otros, han lucido delantal en la televisión. Además de contagiar a todos el amor por la cocina y querernos alzar con tres estrellas Michelín en la cocina de casa. Que sí. Que da muy bien el pego recibir a los amigos en casa, llevarlos a tomar un vinito en la cocina mientras tú preparas la cena y ellos te dan charla. Muy cool, ¿eh?
Delantales publicitarios, un regalo promocional para los más cocinitas o más manitas
En fin, que con todo esto que te hemos dicho, lo que queremos darte a entender es que comprar delantales como regalo promocional es un acierto.
En RegaloEmpresas tenemos varios modelos de delantales serigrafiables, apropiados cada uno de ellos para una ocasión o perfil. Aparte de su función entre ollas y sartenes, delantales para cocineros, también hemos mencionado los delantales para camareros, peeeeeero no podemos olvidar los delantales para dibujar. Ya sabemos a dónde puede llegar la cera de colorear, ¿verdad?
El catálogo tiene casi 50 modelos distintos de este regalo que viene siempre bien. Entre estos modelos distintos tenemos también delantal con herramientas para la barbacoa, delantal de chef, delantal vaquero, delantal para dibujar, delantal para niño, delantal laminado, delantal para camareros…
Lo que más me gusta del delantal estampado es que tiene un precio muy asequible. Y aunque también tenemos algunos modelos de mayor rango de precio por su calidad y originalidad, su modesto precio permite que completes tus regalos comerciales con un gorro de cocinero o con una manopla a juego.
En cualquier caso, puedes personalizar con tu logo y convertir este regalo en una delicatessen para quien lo reciba.