Carpetas personalizadas y portafolios para tus reuniones de trabajo
Las primeras, las carpetas organizadoras, son artículos publicitarios duraderos, mayestáticos y con una intención de impacto y de uso más contundente. Es decir, este tipo de carpetas en las que su interior se pueden encontrar blocs de notas, distintos bolsillos y compartimentos, bolígrafos personalizables originales, calculadoras e incluso soportes y cargadores para móviles, son perfectas para regalar a socios, empleados y clientes con un práctico uso diario, ideales compañeras de días de visitas y viajes de negocios y la organización de congresos u otros eventos.
La personalización de estas carpetas organizadoras admite varias técnicas: marcaje a color, marcaje a láser en las placas metálicas con las que vienen adornados algunos modelos, y/o termograbado en la piel, que es un discreto pero distintivo resultado con el que presentar tu logo a tu público.
El segundo gran tipo de carpeta que se encuentra en esta sección es el portafolio. Una carpeta simple que se usa mayoritariamente por agentes, representantes, asistentes a reuniones, entrevistadores, profesionales académicos, en las que dentro hallarás solapas a cada lado que ayudan a la sujeción de los papeles que quieras guardar. De tamaño A4 las más vendidas y en color cartón natural, los portafolios pueden ser impresos con tu logotipo a todo color. Junto a esta variedad de carpeta simple, se halla la carpeta clásica con cierre de gomas que todos hemos usado en nuestros años mozos: en el colegio o en el instituto eran las más usadas y llegaron a su momento cumbre cuando la carpeta sencilla tuvo a su hermana, la carpeta archivadora con todos los separadores necesarios para cada asignatura. En las casas las hemos tenido para archivar las facturas y los papeles del médico.
En cada ocasión, las carpetas organizadoras y los portafolios tienen uso versátil y son una acertadísima forma de hacer publicidad de tu marca.